LA GRAN PROPINA

“La Gran Propina” fue el nombre dado a una acción de “Cliente Misterioso” que ofrecía justo eso, una Gran Propina como muestra de gratitud de una Gran Cerveza -la Gran Reserva de Cruzcampo- a la familia de hosteleros y trabajadores del sector.

En esta acción al canal se estableció un sistema jerárquico que permitía la consecución progresiva y acumulativa de propinas, nuevas oportunidades, y la posibilidad de llevarse la GRAN PROPINA final de 5.000€. Con este sistema, Cruzcampo conseguía agradecer a los camareros no solo la prescripción, sino también medir el grado de asimilación de las características y bondades del producto, y su profesionalidad a la hora de trasladar este contenido a los consumidores.

Los propietarios de los establecimientos formaban parte de este sistema de incentivos. Su objetivo consistía en la colocación de los elementos de comunicación y PLV de la marca en su establecimiento en un lugar visible.